A lo largo de la geografía nacional, la disponibilidad de agua varía y aunque ciertos estudios indican que la mayoría de los habitantes de nuestro país tienen acceso al vital líquido, aún existen zonas con serias limitaciones de este recurso natural.
Una de estas zonas está ubicada al norte de Chile (desde la Región de Arica y Parinacota hasta la Región de Coquimbo). En éstas se presenta el mayor déficit hídrico en los años de sequía moderada y extrema.
Datos recientes entregados por la Corporación Nacional Forestal (CONAF) sostienen que hasta el año pasado el 72% de la superficie del país sufría de sequía en alguno de sus grados, afectando al 90% de los habitantes. El 79% del territorio tiene algún riesgo de degradación y el 27% de sufrir desertificación, esto último, entendido como un proceso de escasez de agua sostenido en el tiempo.
Y lo más grave, en este dramático escenario, cerca del 85% del agua de Chile corre hacia el mar sin ser aprovechada.
Fuente: Presentación "los desafíos del cambio climático", profesor Fernando Santibáñez, Enagro 2017.
Fuente: Cepal.